Un buen masaje erótico es una gran manera de conquistar a tu pareja o de conseguir reavivar la llama de la pasión. En este artículo te damos algunos consejos para hacer masajes eróticos, te presentamos diferentes técnicas y te entregamos los mejores trucos para que puedas disfrutar al máximo de una experiencia erótica con los mejores masajes del mundo. Revisa nuestra guía básica y conviértete en un experto/a en el arte de los masajes eróticos.
Cómo hacer masajes eróticos
En primer lugar, para hacer masajes eróticos muy placenteros debes saber cómo hacerlos y para ello debes tener en cuenta desde el ambiente hasta la técnica pasando por otros puntos muy importantes y que a los principiantes se les suelen olvidar.
Para gozar más de estos masajes en pareja os recomendamos siempre una cena ligera. Se trata del momento ideal para una cena afrodisíaca con ostras y cava y fresas con chocolate para el postre. Asimismo, se debe lograr que el ambiente sea el adecuado creando un lugar tranquilo, sin tecnología, con luces bajas, música de ambiente, comodidad y la temperatura adecuada para poder disfrutar al máximo de la experiencia.
También será muy importante conseguir buenos aceites de masaje como los que presentaremos en los puntos siguientes y pensar al máximo en la comodidad de la pareja quitándose las joyas, cortándose las uñas, etc. Para disfrutar mucho más de esta experiencia se deben dejar de lado todos los tabús y compartir la experiencia y las sensaciones con la pareja guiándola y ayudándola en todo momento para que las dos personas puedan disfrutar.
Entre las técnicas a aplicar para realizar un buen masaje erótico se deberá mezclar la ventosa, consistente en golpes ligeros y suaves con los pequeños golpes al final porque sexualmente estimulan muchísimo. Las otras técnicas que se deben utilizar son el masaje ondulatorio, que sin duda será especialmente interesante en los pies y en los pechos, zonas erógenas y el amasamiento, que consiste en directamente amasar las zonas más musculosas, siendo esta técnica especialmente interesante para las nalgas y los muslos.
Masajes eróticos en pareja, técnicas básicas
Asimismo, para los masajes en pareja existen diferentes técnicas específicas con los que ambos miembros de la pareja disfrutarán al máximo. En primer lugar encontramos el denominado masaje californiano o de espalda. Se trata de una técnica clásica pero placentera en la que una persona (normalmente el hombre), se tumba hacia abajo y la mujer se ubica en su cabeza y con las manos va masajeando hasta las nalgas y después baja un poco para volver a subir. Se trata de un masaje ideal para terminar con las tensiones y conseguir que la otra persona se relaje
En segundo lugar recomendamos el masaje de senos para el que la persona que va a dar el masaje se debe ubicar al lado de su pareja, en la zona de su cadera y colocar las manos en los senos o pectorales logrando envolverlos. A partir de aquí se deben hacer movimientos circulares y después deslizar los dedos amasando d forma delicada. El masaje se puede extender también hacia el vientre porque ambas son zonas erógenas y sin duda recomendamos estos masajes para despertar al máximo la libido.
Por último recomendamos el masaje de nalgas para el que una persona de la pareja se sentará hacia abajo y la otra persona encima de sus nalgas las irá masajeando en círculos, primero con las palmas y después con los pulgares. Se trata de un masaje que además de relajar la tensión es especialmente excitante.
Aceites para masajes eróticos
A la hora de realizar masajes eróticos existen diferentes elementos como los juguetes sexuales o los aceites que pueden ser especialmente interesantes para lograr mejorar las sensaciones e intensificar al máximo el placer.
En primer lugar recomendamos los aceites de masaje porque hacen mucho más sencillo el vivir al máximo estas experiencias y conseguir despertar todos los sentidos y por tanto que sea más fácil disfrutar mucho más del sexo. Una de las mejores opciones son los aceites comestibles, ya que os permitirán disfrutar mucho más de vuestras fantasías en pareja. Aceites de miel o de fresa son muy recomendables.
En segundo lugar recomendamos también los aceites terapéuticos, ya que, además de incorporar muchas vitaminas A,D,E,F, etc. son especialmente interesantes para conseguir cuidar y relajar el cuerpo de cualquier persona. Por último recomendamos los aceites de efecto frío y calor o aquellos que se activan con el contacto físico para propiciar la mejor experiencia posible con el masaje erótico.
Técnicas de masajes eróticos para hombres
Entre las técnicas principales de masajes eróticos para hombre se puede empezar de la misma forma con hombres y mujeres, realizando un masaje de espalda, nalgas o pecho los que hemos explicado en los puntos anteriores para después continuar de forma más específica.
Recomendamos usar aceites de masaje o lubricante para que el masaje erótico sea mucho más excitante. Se debe llegar a la zona del pubis y masajear formando un triángulo con las manos por la espalda o en la parte delantera e ir subiendo por el tronco de forma pausada y controlando las respiraciones. A partir de aquí, como si cogieras una cuerda, será interesante ir subiendo una mano y masajear con la otra y después viceversa: ir cambiando de mano mientras realizas un masaje muy excitante.
Tampoco deberías olvidarte de masajear bien las zonas de alrededor del órgano sexual masculino para lograr realizar un masaje mucho más completo y erótico.
Técnicas de masajes eróticos para mujeres
En los masajes femeninos recomendamos empezar desde los pies masajeando el metatarso e ir subiendo y bajando haciendo círculos hasta después llegar a las rodillas. Después se debe estimular la zona que une las rodillas y los genitales ya que se trata de un lugar único con el que se consigue mucha relajación y mucha excitación con los mismos movimientos.
Cuando ya llegas a las rodillas debes abrir las piernas e ir subiendo por la entrepierna haciendo presiones relajadas con el pulgar ya que se trata de una zona muy sensible y es por ello que se debe masajear con cuidado pero con pasión. Esta zona se encuentra conectada con el clítoris femenino y también con el pene con lo que sin duda también se puede aplicar esta técnica a los hombres. A partir de aquí debes realizar un triángulo con las manos en la zona del pubis y hacer presión con los dedos.